Propone la creación de protocolos que garanticen la entrega segura de los menores a sus padres o tutores, de modo que, cuando por alguna razón, una niña o niño deba permanecer más tiempo en un recinto educativo, incluso, después de concluir sus horarios de atención, exista un protocolo que garantice su acompañamiento hasta la entrega a sus padres o tutores o, en su caso, a las autoridades que, por ley, les corresponde atender a los niños en situación de extravío o abandono.